Los
materiales para aprender a leer y a escribir deben ser adecuados para
cada etapa del aprendizaje lectoescritor. No es lo mismo que estén
empezando a identificar las letras, a que ya sepan leer palabras
completas o incluso frases enteras, ¡y eso debemos tenerlo en
cuenta!
Para
las etapas iniciales un recurso que suele pasar desapercibido son los
álbumes ilustrados,
pero lo cierto es que son una
herramienta fenomenal para introducir a los peques en la lectura. Y
es que en él se aúnan diversos aspectos que pueden ayudarles a
identificar, entender, relacionar e interpretar las grafías y
sonidos, ¡y
todo gracias a las imágenes!
Porque
sí, las imágenes son fundamentales durante la adquisición de la
lectura, ya que proporcionan un camino
visual mediante
el que interpretar un texto al que aún no pueden acceder por sus
propios medios. Con las ilustraciones se ayuda a guiar
la historia
que presenta el texto, se
aportan
detalles y
se anima a
trabajar la memoria visual
y la
discriminación visual,
dos aspectos muy importantes para la correcta adquisición de la
lectura.
Además,
dadas las limitaciones de un lector en ciernes, el álbum ilustrado
permite disfrutar
de hasta tres historias:
la que proporciona el texto, la que proporcionan las ilustraciones y
la historia que resulta al hacer una combinación del texto y de las
imágenes.
Por
otra parte, también es importante que aprendan
a “leer” las imágenes.
Las bases de nuestra comunicación y entretenimiento se apoyan en
dibujos, fotografías, vídeos, gráficas y otros elementos donde se
prescinde de la palabra escrita. Por ello, un libro ilustrado es un
recurso ideal para empezar a entender los mensajes de una sociedad
que se comunica fundamentalmente de forma audiovisual.
¡Pero
no solo eso! La forma que tienen de presentar una historia es la más
adecuada para fomentar el gusto
por la lectura
entre los más pequeños, y también para incentivar la creatividad y
la imaginación. Al leer palabras pintamos imágenes en nuestra
mente, y al ver imágenes, creamos relaciones e historias que las
interpretan y les dan un significado.
Conscientes
de todos estos beneficios, en DYLAR contamos con varias colecciones
de probada eficacia que funcionan muy bien para lograr este cometido.
Hablamos
de las colecciones COLORES, que
trabajan los colores y las formas;
¡DUENDES!, que
tratan sobre las personas y su relación con distintos entornos,
y FRUTAS
Y VERDURAS, para
descubrir sus propiedades y aprender qué hacer con ellas.
También
tenemos la colección de RATÓN
BLANCO, dónde
aprenderán 4 palabras mágicas muy importantes, y donde se
trabajan las habilidades sociales.
Y por último, contamos con
la colección ÁLEX
Y PANCHO, compuesta
por 4 historias de valores en las que un niño y un dinosaurio se
verán envueltos en diferentes contextos y situaciones con las que
cualquier pequeño va a tener que lidiar en algún momento, como el
nacimiento de un hermano o la primera vacuna.
AQUÍ podéis ver los BOOKTRAILERS de casi todas las colecciones.
AQUÍ podéis adquirir TODAS LAS COLECCIONES.
¿Cuál
es tu favorito? ¡Te leemos en comentarios!